Ekapol Chanthanwong, el entrenador del equipo de fútbol que junto a los 12 niños tailandeses quedó atrapado en la red de cuevas de Tham Luang el pasado 23 de junio, desempeó un papel clave para que los pequeños se mantuvieran con vida.
Según reporta el Washington Post, el joven de 25 año es un exmonje que perdió a sus padres cuando tenía 10 años y vivió en un templo casi la mitad de su vida, hasta que empezó a entrenar al recién conformado equipo Moo Pa.
De acuerdo con declaraciones de los oficiales de rescate, es uno de los que se encontraban más débiles del grupo ya que compartió sus raciones de alimentos y agua. Además les enseñó a los niños a meditar para permanecer tranquilos y conservar la energía.
Si él [Ekapol] no hubiera estado con ellos [los niños], ¿qué le habría sucedido a mi hijo?«, dijo la madre de uno de los adolescentes atrapados en la cueva, en una entrevista concedida a un canal de televisión tailandés.
Por su parte, un viejo amigo de Ekapol, Joy Khampai, manifestó que el entrenador ama a los niños «más que a sí mismo», añadiendo que conoce a su amigo y sabe que siempre «va a sentirse culpable» por lo ocurrido.
El pasado domingo fue puesta en marcha una operación de rescate, hace unas horas los últimos 4 niños y Ekapol fueron rescatados.
Fuente: Excélsior
