La noche de este miércoles el jefe de la diplomacia de Estados Unidos (EU), Mike Pompeo, y el general Kim Jong-chol, enviado por el líder de Correa del Norte, Kim Jong-un, se reunieron en Nueva York para afinar la cumbre entre el dirigente norcoreano y el presidente Donald Trump. De acuerdo con la agencia AFP, el brazo derecho del líder norcoreano que llegó a Nueva York, en un edificio cercano al de la Organización de las Naciones Unidas, se convirtió en el responsable de mayor nivel de su país que visita EU en los últimos 18 años.
Las conversaciones son una señal de que está avanzando la planificación de la cumbre, inicialmente programada para el 12 de junio, a pesar de que Trump canceló la cita la semana pasada a través de una carta a Kim. Posteriormente, sin embargo, el mandatario estadunidense afirmó que la cumbre todavía tenía opciones de producirse en la fecha señalada inicialmente. El pasado lunes, el diario The Wall Street Journal, informó de que Estados Unidos ha postergado una serie de sanciones contra Corea del Norte que tenía preparadas a la espera de que progresen los nuevos contactos para recuperar la cumbre entre los dos países.
De celebrarse, la reunión supondría el primer encuentro en la historia de mandatarios de Estados Unidos y Corea del Norte tras casi 70 años de confrontación iniciados con la Guerra de Corea (1950-1953) y de 25 años de negociaciones fallidas a cuenta del programa atómico de Pyongyang. Los analistas creen que Estados Unidos está tratando de determinar si Corea del Norte está dispuesta a dar suficientes pasos hacia la desnuclearización para permitir que la cumbre se realice.
En tanto, el jefe de facto del gabinete del líder norcoreano, Kim Chang Son, viajó el lunes por la noche a Singapur vía Pekín, informó la emisora pública japonesa NHK. Al mismo tiempo, un equipo estadunidense de «avanzada» estuvo en Singapur para reunirse con los representantes norcoreanos. En Singapur, un equipo de funcionarios estadunidenses se encontraba en un hotel en la isla turística de Sentosa, pero se negó a hacer comentarios.
Fuente: Excelsior