El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, expresó ayer su desconfianza sobre el primer video, tras su salida del hospital, de Yulia Skripal, quien junto con su padre, el exespía ruso Serguéi Skripal, fue envenenada el pasado 4 de marzo en la ciudad británica de Salisbury. No tenemos ningún fundamento para confiar y creer en esto”, dijo Peskov al comentar el video difundido el miércoles en el que Yulia formula una declaración pública en la que afirma que hasta hoy le cuesta hacerse a la idea de que su padre y ella fueran objeto de semejante ataque.
El portavoz de la Presidencia rusa recalcó que hasta ahora Moscú no sabe en qué estado se encuentra Yulia Skripal. No sabemos si hizo estas declaraciones por voluntad propia o bajo presión, no sabemos dónde se encuentra ni en qué condiciones, qué medidas se han adoptado hacia ella, hasta qué punto es responsable de sus acciones y se garantizan sus derechos”, señaló Peskov. Agregó que, si se toma en cuenta la “magnitud de la provocación internacional lanzada por Gran Bretaña, por Londres, contra Rusia”, Moscú mantiene su desconfianza y tiene motivos para ello.
El exespía ruso, quien fue captado por los servicios británicos después, y su hija Yulia, de 33 años, fueron envenenados, según Londres, con un agente nervioso de tipo militar identificado como Novichok, de fabricación rusa. Yulia abandonó el hospital el pasado 9 de abril y su padre, la semana pasada, y desde entonces se desconoce el paradero de ambos.Al despertar después de 20 días en coma supe que nosotros dos habíamos sido envenenados. Hasta hoy me cuesta hacerme a la idea de que contra nosotros se perpetró semejante ataque”, dijo en el video la hija del exespía.
Agregó que ella y su padre tuvieron “mucha suerte de haber salido con vida de este intento de asesinato” y ahora trata de acostumbrarse a los cambios físicos y emocionales.
Fuente: Excelsior