La pérdida de cabello o alopecia es mejor conocida como el efecto secundario más visible de la quimioterapia. Las células del cáncer tienden a dividirse rápidamente y la quimioterapia destruye esas células y retrasa su crecimiento. Desafortunadamente, a la hora de hacer esto, también destruye las células saludables del cabello que también se dividen rápidamente
El 90% de los pacientes que atraviesan los tratamientos de quimioterapia sufren de alopecia, el cual ha generado un gran impacto en los pacientes (sobre todo en mujeres), pues enfrentan depresión y muchas veces renuncian a sus tratamientos
La quimioterapia utiliza una combinación específica de medicamentos, la cual depende enteramente del cáncer del paciente. Algunos medicamentos provocan alopecia, otros no. Sin embargo, hoy en día existen sistemas que previenen un 89% la pérdida de cabello.
Se ha comprobado que el uso del enfriamiento del cuero cabelludo o de las llamadas ‘gorras frías’ son una manera eficaz para combatir la pérdida del cabello causada por tratamientos de quimioterapia, e incluso puede llegar a ser una forma de retener o preservar completamente el cabello. Para el paciente, esta es una oportunidad de retomar algo de control, conservar su privacidad y fomentar una actitud más positiva hacia el tratamiento.
¿Qué es el enfriamento de cuero cabelludo?
El enfriamiento del cuero cabelludo puede utilizarse con todos los cánceres de tumores sólidos tratados con fármacos quimioterapéuticos como taxanos, agentes alquilantes y agentes intercaladores de antraciclinas/ADN. Estos medicamentos se dirigen hacia las células de rápida división y a los queratinocitos de la matriz, que inducen la pérdida del cabello.
El sistema Paxman para el enfriamiento del cuero cabelludo, Paxman Scalp Cooling System, consta de una compacta unidad de refrigeración que contiene un líquido refrigerante que circula a través de gorras diseñadas especialmente para este fin.
La gorras empleadas en el tratamiento están hechas de ligera silicona biocompatible, y al ser suaves y flexibles, se ajustan cómodamente y con seguridad durante el tratamiento.
Las gorras se colocan 20 minutos antes, durante y 20 minutos después de la aplicación de quimioterapia. Al enfriarse hacen que las células de rápida reproducción que se encuentran en el folículo piloso no se reproduzcan, evitando así la pérdida de cabello.
Este sistema estará disponible en nuestro país para el 2019, así que no dudes en estar al tanto de los nuevos y siguientes avances.
