Luego de la administración de Roberto Borge en Quintana Roo, los problemas de seguridad y de liquidez económica fueron una herencia que el nuevo gobierno estatal ha dado prioridad en su resolución para mejorar la calidad de vida de los habitantes del estado. En materia de seguridad, durante varios años, muchas de las policías estuvieron en el olvido, las instituciones de impartición de justicia dejaron miles de expedientes sin revisión. Se fue descomponiendo el tejido social y esto ha provocado una ola de intranquilidad que hemos venido trabajando con los tres órdenes de gobierno para alcanzar la paz y tranquilidad”, comentó el gobernador de Quintan Roo, Carlos Joaquín González.
Y al mismo tiempo se ha trabajado en una Fiscalía autónoma, que busca impartir justicia correctamente, que atienda a los ciudadanos y que permita que haya confianza, nuevamente. Estamos a punto de iniciar un proyecto de videovigilancia que incluye la construcción de un C5 con miles de cámaras en los puntos más importantes del estado, para mayor control y vigilancia”, comentó. Carlos Joaquín González agregó que antes de terminar el año, se contará con una base de policía militar que ayudará a las corporaciones municipales y estatales, a mejorar las tareas de vigilancia, para mayor seguridad y tranquilidad de la población.
En cuanto la situación económica de la entidad, la secretaria de Finanzas y Planeación, Yohanet Torres Muñoz, destacó que la entidad ha logrado mantener una calificación “BBB estable”, gracias a la reestructura de la deuda que dejó el gobierno de Roberto Borge. La funcionaria estatal precisó que la deuda estatal es de 19 mil 191 millones 527 mil 714 pesos, misma que se amplió en su periodo para obtener más liquidez, principal problema de la administración el año pasado, en materia de finanzas públicas. La falta de liquidez era terrible, no había otra cosa qué hacer. Se reestructuró buscando siempre un poco de liquidez. Esto dio un poco de holgura. Pero ahora estudiamos el comportamiento de las tasas de interés para tener una renegociación para que la deuda sea más manejable”, comentó.
Fuente: Excelsior
