Como cada año, los nominados a la entrega del Oscar tuvieron su tradicional comida para convivir y desearse buena suerte el día del evento.
El “luncheon“ se realizó este lunes al mediodía en el hotel Beverly Hilton de Beverly Hills, a donde acudieron 175 nominados a la próxima entrega de la estatuilla dorada.
El director mexicano Guillermo del Toro llegó sonriente y amable saludando a los fans que estaban en el lobby del hotel. Del Toro accedió a tomarse fotos y dar uno que otro autógrafo a sus seguidores, quienes le desearon mucha suerte en el evento.
“Es muy bonito que reconozcan tu trabajo, que te apoyen y yo con gusto convivo con ellos“, dijo.
Su película The shape of water lidera la edición número 90 del Oscar con 13 nominaciones.
Para el mexicano esto no es una presión, expresó, sino un orgullo que su producción sea reconocida a nivel mundial.
“Uno hace su trabajo y ya lo que se dedica ese día no depende de uno, yo sólo estoy disfrutando este momento”, señaló.
Del Toro se la pasó conversando con varios de sus colegas directores, entre ellos. Steven Spielberg. También intercambio algunas palabras con la directora Greta Gerwig (Lady Bird), a quien dijo gustarle mucho su cinta.