Michael Flynn, ex asesor de seguridad nacional del Presidente estadounidense, Donald Trump, admitió haberle mentido al Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) sobre una conversación con el Embajador ruso en diciembre pasado.
Esto, tras ser acusado por la Fiscalía especial de Estados Unidos que investiga la interferencia rusa en las pasadas elecciones presidenciales del país. Flynn es el primer ex funcionario de la Administración Trump que admite culpabilidad en el caso.
Como parte de un acuerdo con el Fiscal, Flynn admitió que un miembro de alto rango del equipo de transición de Trump lo dirigió a contactarse con funcionarios rusos en diciembre de 2016.
Flynn dijo haber discutido con el Embajador Sergei Kysliak sobre las sanciones que la Administración de Obama había impuesto Rusia, lo cual había negado anteriormente.
Según un reportaje de The New York Times, el ex asesor cortó su contacto con la defensa de Trump, lo que dio los primeros indicios de su cooperación con la investigación de la Fiscalía especial sobre la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016.
Con ello, según el medio, podría dar información a los investigadores a cambio de un trato sobre su sentencia, pues mentir al FBI es una ofensa que puede acarrear hasta cinco años de cárcel.
Sobre la identidad de la persona que habría coordinado los contactos con Rusia, la cadena ABC aseguró que se trataba del mismo Donald Trump, mientras el portal Buzzfeed News señaló que se trataba de su yerno, Jared Kushner. Ambos reportes están basados en fuentes anónimas cercanas a Flynn y no están confirmados por otros medios.
La Fiscalía especial ya había presentado cargos contra el ex jefe de campaña de Trump, Paul Manafort, como parte de la investigación.
Además, el Fiscarl Robert Mueller también indaga, según The Wall Street Journal a Flynn por negociar la entrega al Gobierno turco de un líder opositor que reside en Estados Unidos, Fetullah Gulen, a cambio de 15 millones de dólares.
En marzo de este año se reveló que Flynn impulsaba los intereses del Gobierno de Turquía a través de su empresa de seguridad Flynn Inet Group.
Un mes antes fue expulsado de la Casa Blanca, cuando se reveló que mintió sobre mantener conversaciones con agentes de Rusia.
Fuente: Reforma
