La embajadora de Estados Unidos en México, Roberta Jacobson, se sumó a las muestras de cariño ofrecidas por decenas de seguidores de Pedro Infante, con motivo de los 100 años del natalicio del cantante, en el Panteón Jardín.
Desde temprano el cementerio donde descansan los restos del actor e intérprete, recibió a admiradores, así como a la diplomática estadunidense, quien estuvo por algunos momentos frente a la tumba del «Ídolo del pueblo».
Jacobson señaló que le parece fascinante este tipo de muestras de afecto a un personaje que logró trascender, “Pedro Infante representa una persona sencilla, importante artísticamente, además me asombra la fidelidad de sus seguidores a los que ahora se suman jóvenes, eso es maravilloso y es una tradición que pasa por generaciones”.
“Me parece muy lindo esto y tuve la oportunidad de charlar con una chica de 15 años que se sabe todas las canciones; ella me dijo que inició viendo las películas del actor, gracias a su padre, así que es maravilloso que esto se convierta en algo familiar”, apuntó la embajadora.
“Vine a este lugar, porque creo que es la mejor forma de conocer un país, porque no solo se debe conocer por los periódicos o encabezados, sino también a través de sus tradiciones y como extranjeros creo que es la mejor forma”, recalcó.
Tras estar por unos momentos en la tumba del cantante y contemplar las muestra de cariño del fiel público que aún lo recuerda con cariño, Jacobson se retiró del lugar, mientras temas como “Amorcito corazón”, “El oso carpintero” y “No volveré” sonaban.
Fueron los mismos seguidores de Pedro Infante, quienes los entonaron para honrar al actor, quien es recordado este sábado 18 de noviembre con motivo de los 100 años de su natalicio.
Cerca de 50 asistentes depositaron algunos arreglos florales, donde predominaron las gladiolas rojas.
Algunas de las personas como Eulalio González y René Ramírez llegaron con pancartas en las que resaltaron la celebración y enfatizaron “100 años, Pedrito y sigues con nosotros”.
En unas horas más la familia del cantante, oficiará una misa en su honor en la Basílica de Guadalupe; previo se realizará una caminata que saldrá de la Cruz de la Glorieta de Peralvillo.
Pedro Infante nació el 18 de noviembre de 1917 en Mazatlán, Sinaloa, aunque desde muy pequeño vivió en Guamúchil, poblado sinaloense que consideraba su tierra natal. Murió el 15 de abril de 1957 en un accidente aéreo y su legado fílmico y musical ha trascendido en el tiempo.
