Sólo sucursales bancarias, planteles educativos y una obra de construcción desalojaron entre las calles Halacho y Homún
En establecimientos mercantiles ubicados en la Carretera Picacho-Ajusco, en Tlalpan, hubo poca participación en el megasimulacro de este martes 19 de septiembre, en conmemoración por el terremoto de 1985.
En el tramo ubicado entre las calles Halacho y Homún, sólo en algunos establecimientos como sucursales bancarias, planteles educativos privados y una obra de construcción se observaron acciones de desalojo de inmuebles.
En el resto de establecimientos mercantiles, la mayoría pequeños como zapaterías, fondas, farmacias, panaderías, casas de empeño, pizzerías, rosticerías y de vía pública como puestos de periódicos, tamales o jugos, el ejercicio prácticamente pasó desapercibido, se observó.
La alerta sísmica sonó a las 11:00 horas, pero se escucharon más los camiones de carga y autobuses de transporte público que habitualmente circulan por esta carretera.
Algunas personas indicaron que, simplemente no se enteraron del macrosimulacro, ni oyeron la alerta sísmica.
Yo ni sabía, sólo porque vi que salieron los chavos del Icel, sino ni me entero porque ni se escuchó la alarma», reconoció Claudia Hernández, una vendedora.
Excelsior
