Tener una enfermedad mental no es el fin del mundo. Con la ayuda y el apoyo necesario, puedes recuperarte, lograr tus metas y llevar una vida normal. No voy a decir que es fácil, porque no lo es, pero siempre hay esperanza.
No son iguales todas
Las enfermedades mentales no pueden encajar en un sólo estereotipo. De hecho, estos estereotipos son increíblemente dañinos porque se burlan de tales enfermedades y dan pie a muchos mitos y desinformación.
La ansiedad no se siente igual para todos
La ansiedad se manifiesta en diferentes maneras. Claro, hay síntomas típicos que uno puede aprender a identificar, pero no todos lo sufren igual. Tú puedes presentar náuseas y dolores de cabeza, mientras que otra persona puede jalarse el cabello o sus cejas. A veces ni siquiera sabrás que lo que estás experimentando es ansiedad.
La depresión no es pura tristeza
De hecho puedes sentirte feliz en ocasiones, pero ese sentimiento se empalidece a comparación de la felicidad que sientes cuando no estás deprimida. También puedes sentir ira y un vacío. Hay personas que viven su depresión a través del distanciamiento de todo.
Hacerse daño no es un llamado de atención
Hay formas más sencillas y menos dolorosas de llamar la atención. Sólo porque alguien se haga daño, no quiere decir que lo esté haciendo sólo para llamar la atención.
Y no quiere decir que esté tratando de suicidarse
Hay muchas personas en este mundo que se lastiman a sí mismas, y la mayoría no ha intentado quitarse la vida. A veces es un mecanismo de defensa (aunque no el mejor) ante la vida y el tratamiento.
No importa si no hay razones para no sentirse tristes
Sólo hay una persona en el mundo que podría tener la peor vida en el mundo, y lo más probable es que no sea yo, ni tú, ni tu mejor amiga. Y lo sabes. Pero cuando tienes depresión, eso ni siquiera importa. Es una enfermedad tan abrumadora, que ésta es lo único que importa. Y, de hecho, la depresión puede ocurrirle a cualquiera, incluso a la persona más afortunada del universo.
A veces la terapia es más que suficiente
Hay personas que pueden recuperarse hablando de lo que piensan y lo que les ocurre. Guardarse las cosas no sólo es dañino para nuestra salud mental, sino también la física.
Sin embargo, a veces es necesario el medicamento
Y no es que sea algo malo, sino que podría ser necesario para acelerar el proceso o atacar síntomas físicos, como falta de sueño o de apetito.
Las enfermedades mentales son reales
La mayoría cree que no son la gran cosa, que sólo se arreglan con un libro o una terapia, pero pueden provocar la muerte tan fácilmente como el cáncer. Arruinan vidas y cada vez son más comunes. Es importante que empecemos a tomarlas en serio.
FOTO:Especial
FUENTE:Eme de mujer