Aumento de penas penales o administrativas no evitará que los jóvenes beban y causen accidentes, es un tema de responsabilidad personal, argumenta el legislador Antonio Rangel Méndez, presidente de la Comisión de Procuración de Justicia.
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Luego de que se diera a conocer sobre la puesta en libertad del menor de edad que provocó un accidente en Bernardo Quintana, en febrero de este año, en el que falleció el conductor de un taxi, el diputado Antonio Rangel Méndez, presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, indicó que no se ha pensado en crear una propuesta de ley para abatir este tipo de sucesos.
Y es que refirió que se trata de un tema de responsabilidad compartida, tanto de autoridades como de las familias y los propios jóvenes, puesto que hoy existe un reglamento de tránsito que prohíbe el manejar en estado de ebriedad, además de que ya está en ley que los menores de edad no pueden conducir ni tampoco ingerir bebidas alcohólicas.
Por lo que el cumplir con estas responsabilidades no se garantizará con el hecho de incrementar las sanciones penales y administrativas, sino en la voluntad de los propios ciudadanos y los menores infractores.
«El simple hecho de aumentar las penas para todos los delitos no significa que se acabarán todos los delitos, la realidad es que eso no funciona aquí en Querétaro, en México o en el mundo. Este tipo de circunstancias se dan y se originan por situaciones mucho más profundas que están incluso dentro de las propias familias. Nosotros no tenemos en este momento para este caso algún tipo de propuesta concreta, sí el análisis permanente del Código Penal para aumentar las penas y valorar los procesos que se puedan seguir a partir de las circunstancias que se estén dando…»
Así mismo, Rangel Méndez resaltó la oportunidad que actualmente brinda la tecnología para evitar que los menores de edad así como las personas que han consumido alcohol conduzcan un vehículo, por lo que llamó a padres e hijos a tomar lo anterior con responsabilidad, para evitar pérdidas que lamentar.
«La propia dinámica de la tecnología que tenemos, las diversas opciones para trasladarse de un lugar a otro, nos permiten estar mucho más atentos, los padres pueden tener mucha más comunicación con sus hijos, el traslado puede hacerse por diversas plataformas instaladas en el teléfono, los mismos taxis, claro que eso implica una mayor responsabilidad pero eso es tarea de todos, particularmente de las familias, la autoridad y también de los propios jóvenes…»
RR Noticias
Ivet Hernández
