Sergio Arturo Guerrero, Magistrado del Tribunal Electoral del Estado de Querétaro (TEEQ) indicó que aún si la propuesta de reforma a la Ley Electoral que presentó este organismo no es aprobada por la Legislatura, la implementación de paridad de género para todos los cargos de elección popular será un tema que no tendrá retroceso.
Aunque recordó que la determinación final corresponde a quienes forman parte del Congreso Local, resaltó que la paridad sustantiva es un tema que si bien no es considerado dentro de la ley electoral, sí motivará a la discusión o la presentación de estudios al respecto.
En ese sentido indicó que la propuesta presentada por el Tribunal representa un gran avance en la materia y que es un tema que ya no tiene regresión.
«Yo creo que al menos van a ser materia de discusión en la Legislatura, yo creo que al menos van a generar algún estudio, algún pronunciamiento acerca de sí son pertinentes o no, eso es soberanía absoluta de los representantes populares y nosotros lo que hicimos fue presentar una propuesta (…) eran cosas que no se discutían ¿a quién se le ocurría hace dos elecciones hablar de paridad de género en las elecciones, en Querétaro jamás se hizo a pesar de que había institutos electorales, a pesar de que había una sala electoral, jamás se les ocurrió exigir que hubiera la mitad de mujeres candidatas, hoy estamos deliberando, es un gran avance, y es un tema que ya no tiene regresión, es de los temas que se quedan y crecen para bien», afirmó.
En cuanto a la participación de las mujeres en la democracia y procesos electorales indicó que a nivel formal la Ley General de Partidos sí establece la paridad; mitad hombres, mitad mujeres; no obstante en la parte material la paridad no se ve respetada, esto sucede en varios estados e incluso en las Cámaras de Diputados y Senadores.
Finalmente compartió que para consolidar la igualdad material hace falta trabajar en normas partidistas, en prácticas partidistas y en derribar los techos de billetes, puesto que en las leyes su inclusión ya es considerada.
Por: Iraí Silva