La noche del domingo, el Teatro Dolby de Hollywood aplaudió a Casey Affleck por ser elegido como Mejor Actor por su papel en la película «Manchester junto al mar». Sin embargo, su reconocimiento fue dividido, ya que algunos de los presentes no demostraron estar contentos con su trofeo ¿La razón? antiguas acusaciones de acoso sexual en su contra.
Así lo demostró Brie Larson al entregarle la estatuilla dorada al hermano menor de Ben Affleck. La actriz permaneció seria y distante, y no dedicó ni un sólo aplauso al ganador. Este gesto fue interpretado por la prensa como un recatado «desaire». Larson ganó el Oscar el año pasado por su rol en «La habitación», cinta en la que interpretó a una víctima de abusos sexuales.
Tras dicho rol, se convirtió en activista. Después de recibir el Oscar, el protagonista de «Manchester junto al mar» concedió una entrevista al medio Boston Globe, en la que justamente habló de sus sentimientos y de las acusaciones que debió enfrentar en 2010.
«Creo que cualquier clase de maltrato de cualquier persona por cualquier razón es inaceptable y repugnante, y todo el mundo merece ser tratado con respeto en el lugar de trabajo y en cualquier otro lugar», aseguró el actor. «No hay nada que pueda hacer al respecto, más que vivir mi vida tal y como lo hago y hablar de cuáles son mis propios valores y cómo trato de vivir con ellos todo el tiempo», agregó.
Las semanas previas a los Oscar, varios medios publicaron artículos en los que recordaban las acusaciones de acoso sexual que tuvo que enfrentar Affleck en 2010, por parte de dos mujeres. Una de ella era la directora de fotografía Magdalena Górka, quien aseguró que el ganador del Oscar la sometió a comentarios, insinuaciones y avances sexuales durante casi todo el rodaje del documental «I’m still here».
Mientras que la la productora Amanda White lo acusó de avances sexuales, de haberla tocado y de dejarla fuera de su habitación mientras Affleck estaba con otra mujer.
Las dos demandas llegaron a un acuerdo fuera de la corte por montos no revelados y a ambas mujeres obtuvieron créditos por sus respectivas participaciones en «I’m still here». En entrevista con Boston Globe, el actor explicó que todas las partes de los casos tienen prohibido hablar de ellos y que nadie de los que actualmente lo está juzgando sabe qué fue lo que ocurrió.
