Los consumidores mexicanos no solo se enfrentarán este año a las amenazas proteccionistas y antimexicanas del presidente estadounidense Donald Trump, sino a aumentos constantes en los precios de las mercancías y servicios, por lo menos hasta finales de 2018.
El Banco de México (Banxico) estima que la inflación estará fuera de su meta de 3% +/- 1%, afectada tanto por la liberalización del precio de los combustibles como por la depreciación del peso, lo que amenaza con traducirse en un mayor deterioro de las expectativas inflacionarias.
La inflación aumentó a una tasa anual de 4.72% en enero, la cifra más alta desde septiembre de 2012, sin embargo, la inflación al productor (sin contar petróleo) aumentó 9.8%, mientras que los precios intermedios subieron 13.1% un máximo desde 2003.
“Definitivamente hay un riesgo de que ya las empresas empiecen a trasladar el aumento de sus costos a los precios (finales), cosa que no han hecho hasta ahora, hay una gran cantidad de costos que están enfrentando y no les quedará de otra más que trasladarlo. Eso, más los aumentos esperados en los precios de la gasolina pudieran tener más impactos en la inflación”, comentó en entrevista el economista Jonathan Heath.
Por ejemplo, desde 2015 a lo que va de este año, el peso ha perdido 27.61% ante el dolar.
Banxico, comandado por Agustín Carstens, elevó el jueves su tasa de interés referencial en 50 puntos base a 6.25%, esto para contener el aumento en los precios al consumidor.
“Se considera que el balance de riesgos para la inflación ha seguido deteriorándose”, dijo el banco central en su comunicado de política monetaria, en donde apuntó que entre los riesgos a la alza está que las expectativas de inflación se eleven aún más ante una mayor depreciación del peso y de que los incrementos en los precios de los energéticos eleven más allá de su impacto natural a los precios de los bienes y servicios que los utilizan como insumos.
No obstane, Banxico espera que durante los últimos meses de este año retome una tendencia convergente hacia su meta y se sitúe cerca de 3% al cierre de 2018, pero el consenso de los economistas no es tan positivo para esto.
El consenso de analistas encuestados por Bloomberg ve la inflación cerrando el 2017 en 4.6% y el 2018 en 3.7%, Wells Fargo la ve incluso hasta en 5.4%.
“La inflación parece estar en aumento este año. Esperamos que la tasa general alcance el 6% en el tercer trimestre, el doble del objetivo de 3% del banco central”, escribió en un reporte el analista de Capital Economics, Edward Glossop quien agrega que para finales de año se podría ver una desaceleración al 4% si el peso se recupera frente al dólar.
Las implicaciones de expectativas de inflación más altas se traducen en que Banxico va a tener que subir su tasa de interés más de lo que tiene contemplado, explica Heath. Algunos analistas esperan que la tasa cierre el 2017 hasta en 7.25%, su mayor nivel desde marzo de 2009.
Foto: Especial
Fuente: Expansión