En un plazo no mayor a diez días, representantes de la empresa automotriz y autoridades locales se reunirían para iniciar con el proceso de entrega; el estado atacará nuevos mercados
Después de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, presionara a la estadounidense Ford Motor Company para que no construyera una planta en San Luis Potosí, en la que invertiría mil 600 millones de dólares, la empresa se verá obligada a regresar al gobierno estatal el terreno de 280 hectáreas.
En un plazo no mayor a diez días, integrantes de la compañía automotriz volverán a San Luis Potosí para iniciar con el proceso de retiro en el lugar, anunció Gustavo Puente, secretario de Desarrollo Económico local; en este sentido, resaltó que el predio fue una donación de las autoridades, aprobada por el congreso, y que hoy día está a nombre de la automotriz.
«Por ende, entes estatales y representantes de Ford Motor Company iniciarán una mesa de diálogo para que el paraje sea, de nuevo, pertenencia San Luis Potosí; el terreno consta de 280 hectáreas disponibles para nuevas y futuras inversiones e, incluso, tal vez haya un par de empresas interesadas en adquirir una parte del lugar”, aclaró Gustavo Puente.
El gobierno continuará buscando oportunidades de inversión procedentes de Europa, Asia y Estados Unidos: ‘nosotros seguimos trabajando independientemente de la firma Ford. Tenemos que seguir buscando con más creatividad y ser un poco más agresivos en mercados europeos y asiáticos e incluso con los mismos estadounidenses’.
«Estamos abiertos a seguir siendo un gran lugar para invertir”; el funcionario celebró que San Luis Potosí creció 5.4 por ciento en 2015; en el segundo trimestre de 2016 registró un avance de 5.1 por ciento. Es obvio que la inversión de Ford generaría crecimiento económico, al dar lugar a más de 10 mil empleos directos e indirectos: el reto es sustituir esas inversiones.
Fuente: Excélsior
