La situación educativa en México aún es profundamente desigual.
Al cierre del ciclo escolar 2024-2025, 994 mil 219 estudiantes abandonaron las aulas, según datos recientes del Observatorio de la Educación.
Aunque esta cifra es menor que la registrada en los años críticos de pandemia, su magnitud revela un estancamiento alarmante en las estrategias de permanencia escolar y evidencia que el abandono educativo es una constante en el sistema nacional, especialmente para las poblaciones históricamente marginadas, advirtió el movimiento Educación con Rumbo.
El nivel medio superior continúa como el más afectado: casi un tercio del alumnado (30.9%) abandona sus estudios.
Pero las cifras se tornan dramáticas en modalidades como la de profesional técnico, con tasas de deserción que alcanzan hasta 59.5%, y estados como Baja California, Colima, San Luis Potosí y Sinaloa reportan niveles de abandono que superan 93%.
Los datos sobre educación indígena y comunitaria son aún más desoladores.
En estas modalidades, menos de 70% de los estudiantes logra concluir la primaria y el abandono escolar se duplica en secundaria.
Por ejemplo, sólo 0.3% de las escuelas primarias comunitarias cuenta con electricidad, y en secundaria, ninguna tiene internet o materiales adaptados para la diversidad cultural o para estudiantes con discapacidad.
En la inauguración de la tercera cumbre académica y del conocimiento CELAC-Unión Europea, México reafirmó su compromiso con la cooperación internacional y la creación de un espacio común eurolatinoamericano de educación, ciencia, tecnología e innovación
La secretaria de Ciencias, Humanidades, Tecnología e Innovación, Rosaura Ruiz, recordó que sólo tres de cada 10 jóvenes mexicanos entre 18 y 22 años tienen acceso a la educación universitaria, y que la cobertura total de licenciatura en México es de 43.8%, cifra muy inferior a países como Argentina (107.1%) y Brasil (60%).
Además, México tiene 384 investigadores por millón de habitantes, frente a mil 284 en Argentina 9 mil en Corea.
Excelsior