La selección de España acabó invicta la fase de grupos de la Liga de Naciones de la UEFA, al imponerse este lunes en Tenerife por 3-2 a Suiza tras una frenética segunda parte y un tanto de penal de Bryan Zaragoza en el 90+2.
El delantero Álvaro Morata fue quien provocó la falta, pero casi todos los aficionados reunidos en el estadio Heliodoro Rodríguez López gritaban el nombre del centrocampista del Barcelona, nacido en Tenerife.
Era el primer lanzamiento de penal, sin contar las tandas, que Pedri había lanzado entre sus 30 partidos con la selección española y los 160 duelos jugados con el Barcelona entre todas las competiciones.
Tras adelantarse en el marcador, los pupilos de Luis de la Fuente insistieron sin éxito en el ataque ante una tímida Suiza, que apenas generó ocasiones en la primera parte, pero tampoco se lo puso fácil.
Tres minutos después de reanudarse el choque, los helvéticos cambiaron de cara y perdonaron el empate tras ganar Joel Monteiro la partida a Aitor Paredes, quien cayó al suelo. Pero, el extremo suizo cruzó el balón en exceso, viendo cómo se marchaba el esférico cerca del palo.
En cambio, Monteiro se resarció con una espectacular internada que acabó metiendo el balón entre las piernas del arquero Robert Sánchez en el minuto 62 de juego. El suizo había realizado un jugadón personal tras superar a Grimaldo y Paredes para sacarse de la manga un potente disparo raso.
Con el encuentro en tablas, España volvió a rugir en la zona ofensiva. En una jugada de presión, Bryan Gil logró arrebatar la pelota tras una indecisión visitante y marcó con un imponente zurdazo cruzado abajo en el minuto 69.
La victoria parecía encaminada, pero un intento de despeje de Fabián terminó golpeando a Vincent Sierra dentro del área. Desde los once metros, Andi Zeqiri transformó el penal tras engañar a Sánchez en su disparo en el 85.
Ya en el tiempo de descuento, Bryan Zaragoza llevó a cabo una gran acción individual que forzó la pena máxima. Él mismo lo convirtió en un imparable remate en el 90+2.
elf