Durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, un problema constante fue el desabasto de medicinas que existe en varios hospitales públicos, por lo que para dar una solución se propuso poner en operación el Centro Federal de Almacenamiento y Distribución de Insumos para la Salud (CEFEDIS), mejor conocido como la “Megafarmacia del Bienestar”.
Este inmueble concentra millones de claves de medicinas y facilitar el acceso a fármacos para quienes se les dificulta conseguirlos en las unidades hospitalarias a las que asisten.
Los datos oficiales revelados en el Sexto Informe de Gobierno del titular del Poder Ejecutivo federal muestran que, del 29 de diciembre de 2023 (cuando se inauguró la super farmacia) a junio de 2024, se han surtido mil 155 pedidos de medicamentos.
Estas cifras confirman que en el CEFEDIS se han surtido en promedio seis recetas por día desde su apertura hasta el último corte registrado por la administración federal, con una demanda promedio de cientos de llamadas diarias y pedidos de ciudadanos de varios estados de la República Mexicana.
Mientras que el centro de almacenamiento habilitó una línea telefónica para los derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y al IMSS-Bienestar para responder cualquier duda sobre los medicamentos y para aquellos ciudadanos que no se les surta su receta médica de forma correcta o no encuentren los medicamentos.
Pacientes en busca de medicamentos ‘impagables’
De acuerdo con personas que padecen diferentes enfermedades crónico degenerativas, consultadas por Reporte Índigo, la falta de medicamentos en los hospitales públicos las ha obligado a acudir a este lugar para surtir las recetas que necesitan.
Carmen Ramírez, adscrita al IMSS-Bienestar, reveló que en el Hospital La Raza, ubicado al norte de la Ciudad de México, ha tenido dificultades para obtener el medicamento Nintedanib, que tiene un costo de hasta 70 mil pesos en farmacias y otros centros de venta de medicamentos.
“Necesito una caja por mes para tratar la fibrosis pulmonar que me diagnosticaron en 2022. Tengo que llamar cada inicio de mes para ver si tienen el medicamento, y muchas veces el personal del hospital me comenta que no les ha llegado; que llame otros días. No tengo la capacidad de costear estas pastillas”, expresó la usuaria del seguro social.
Esta situación ha llevado a la paciente a comunicarse con la “Megafarmacia del Bienestar”, donde asegura que le han proporcionado el medicamento en dos ocasiones debido a la escasez en el hospital donde trata su enfermedad.
Con información de Reporte Índigo.
