Los talibanes en Afganistán han implementado un nuevo conjunto de leyes estrictas que buscan regular varios aspectos de la vida pública, especialmente en relación con la visibilidad y las voces de mujeres y hombres.
Estas leyes, parte del marco de «vicio y virtud» del régimen islamista, fueron promulgadas el miércoles y suman nuevas restricciones a la vida diaria de los ciudadanos, particularmente de las mujeres.
Las normas, aprobadas por el líder supremo Hibatullah Akhundzada, abarcan desde el transporte público y la música hasta la apariencia personal y las celebraciones. Por ejemplo, el artículo 13 exige a las mujeres cubrirse completamente el cuerpo con un velo en público, destacando la necesidad de cubrirse el rostro para evitar «la tentación». Además, la vestimenta no debe ser fina, ajustada ni corta.
Se prohíbe la reproducción de música
Entre las nuevas restricciones más destacadas, se prohíbe la publicación de imágenes de seres vivos, una medida que amenaza aún más a los medios de comunicación afganos. También se prohíbe la reproducción de música, cantar en público, el transporte de mujeres que viajen solas, y cualquier interacción entre hombres y mujeres que no sean familiares directos.
Además, tanto pasajeros como conductores están obligados a realizar oraciones en horarios designados, y a los hombres se les prohíbe afeitarse la barba bajo el riesgo de ser despedidos.
Según el ministerio, promover la virtud incluye la oración, el uso del hijab por parte de las mujeres y el cumplimiento de los cinco pilares del Islam, mientras que eliminar el vicio implica prohibir actividades contrarias a la ley islámica.
Un informe reciente de la ONU advirtió que las actividades de este ministerio están creando un clima de miedo e intimidación en Afganistán. Según el informe, los edictos y métodos utilizados para hacer cumplir estas leyes están extendiéndose a otras áreas de la vida pública, como la vigilancia de los medios de comunicación y la lucha contra la adicción a las drogas.
Fiona Frazer, jefa del Servicio de Derechos Humanos de la misión de la ONU en Afganistán, expresó su preocupación por el aumento de la supervisión, especialmente para las mujeres y las niñas, y advirtió que esta tendencia es motivo de gran preocupación para todos los afganos.
Información de la mano con Excelsior