Un diamante excepcional de 2,492 quilates, que apenas cabe en la palma de una mano, ha sido descubierto en la mina de Karowe, en el noreste de Botsuana, según anunció la compañía minera canadiense Lucara este jueves.
Este hallazgo se considera el segundo diamante más grande jamás encontrado, superado solo por el «Cullinan» de 3,100 quilates, extraído en Sudáfrica en 1905.
Botsuana, el mayor productor de diamantes de África, ha consolidado su posición en el mercado global con este descubrimiento histórico.
«Estamos encantados de haber recuperado este extraordinario diamante«,declaró William Lamb, director general de Lucara.
Aunque aún no se ha determinado el valor o la calidad de la piedra, Lucara presentará oficialmente el diamante en Gaborone, la capital del país, con la presencia del presidente Mokgweetsi Masisi.
Tobias Kormind, director general de 77 Diamonds, destacó que este es el mayor diamante en bruto hallado desde el «Cullinan», y señaló que el descubrimiento fue posible gracias a una tecnología avanzada de detección por rayos X que permite extraer piedras preciosas sin dañarlas.
Botsuana, con una población de 2.6 millones, obtiene una gran parte de sus ingresos de la producción de diamantes, que representa el 30% de su PIB y el 80% de sus exportaciones. Lucara enfatizó que estos ingresos han permitido al país financiar sectores esenciales como la educación, la sanidad y las infraestructuras.
Este nuevo hallazgo supera al anterior récord en Botsuana, un diamante de 1,758 quilates descubierto por Lucara en 2019, que fue adquirido por Louis Vuitton.
Información de la mano con Excelsior