JD Vance, el candidato a la vicepresidencia de Estados Unidos, ha sido impulsado por millonarios del sector tecnológico que se oponen a las regulaciones sobre la Inteligencia Artificial.
La autobiografía de JD Vance, «Hillbilly Elegy» (2016), narra la historia de superación de Vance, quien creció en un entorno familiar disfuncional y logró graduarse de Yale. Sin embargo, su carrera profesional muestra una estrecha relación con los gigantes tecnológicos de Silicon Valley, en especial con Peter Thiel.
Peter Thiel, un influyente inversor tecnológico, ha jugado un papel crucial en la carrera política de Vance. Thiel, conocido por su apoyo a Donald Trump y su rechazo a las regulaciones tecnológicas, ha respaldado a Vance desde sus inicios en el sector de la biotecnología hasta su entrada en la política.
La cercanía de Vance con Thiel y otros inversores tecnológicos ha generado preocupaciones sobre la influencia de Silicon Valley en la política estadounidense. Thiel, junto con otros inversores como Marc Andreessen y Ben Horowitz, ve en Trump un aliado para mantener un entorno favorable a la tecnología, libre de regulaciones que puedan afectar a las startups y el ecosistema tecnológico.
Aunque la relación de Thiel con Trump se ha deteriorado por desacuerdos sobre las regulaciones tecnológicas, Thiel sigue apoyando a Vance como un puente entre el sector tecnológico y la política. Con Elon Musk también mostrando su apoyo a Vance, la influencia de Silicon Valley en la próxima elección presidencial es innegable.
En resumen, JD Vance representa una conexión directa entre Silicon Valley y la Casa Blanca, con el respaldo de influyentes inversores tecnológicos que ven en él la oportunidad de mantener un entorno favorable para la innovación y el crecimiento tecnológico en Estados Unidos.
Información de la mano con Excelsior
