Será necesario que tanto el gobierno, la sociedad civil organizada y la iglesia católica trabajen en conjunto para resanar el tejido social que se ha visto afectado por el incremento de la violencia, especialmente cuando las principales víctimas son niñas y mujeres, aseveró el vicario de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril
Aseveró que, desde los hechos ocurridos el 5 de marzo en el Estadio Corregidora, existe una sensación de inseguridad entre la población, por lo que es necesario revindicar el papel de los buenos valores para cambiar esa mentalidad, especialmente en el seno familiar.
El vicario reconoció los esfuerzos del Gobierno Estatal para invertir en la seguridad de Querétaro, desde mejorar el equipamiento y uso de la tecnología, hasta una mejor capacitación de los elementos de policía, sin embargo, subrayó que la estrategia también debe enfocarse en atender las causas de la violencia desde su raíz.
Lara Becerril hizo un llamado a todos los actores sociales y políticos del estado para buscar un trabajo más coordinado, actuando con responsabilidad y sensibilidad para que la seguridad sea un compromiso de toda la ciudadanía y frenar la tendencia actual.
Alan García
