La Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) reiteró que no existen condiciones para el regreso a clases presenciales en las regiones Costa Grande y Acapulco, ante los casos por Covid-19, y las afectaciones causadas por el sismo del 7 de septiembre en varios planteles.
Sin embargo, los docentes aseguraron que respaldarán las decisiones que tomen los comités de padres de familia y directivos en las escuelas.
Al respecto, subrayaron que, aunque no cuentan con cifras oficiales, tienen detectados 40 planteles dañados por el sismo y expresaron que la decisión de regresar a las aulas no corresponde a ellos como maestros, sino a los integrantes de los comités y que como organización respaldarán dichas decisiones.
Además, reprocharon que las autoridades pretendan que los trabajadores de la educación estén frente grupo, cuando tampoco existe una estrategia para evitar una cuarta oleada de contagios por Covid-19.
«En nuestro caso si estamos de acuerdo en regresar a clases presenciales, pero siempre y cuando las escuelas hayan sido objeto de mantenimiento, porque, incluso, hay algunas que fueron objeto de robos y saqueos», dijo.
Adelantaron que se harán consultas con los padres de familia y maestros, a fin de decidir si asisten a clases presenciales o continúan con el modelo educativo a distancia, hasta que las escuelas estén limpias y cuenten con todos los servicios, para evitar contagios del Covid-19.
El pasado lunes, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores propuso que sea el 3 de octubre, cuando se regrese a las clases presenciales en varias escuelas de la entidad.
Excélsior