Atrás han quedado los años en los que sólo súper estrellas como Madonna, Michael Jackson o incluso Lady Gaga se daban el lujo de anunciar sus conciertos en México con meses de anticipación.
En los últimos años es más común ver que los próximos conciertos son anunciados con hasta un año de antelación, tal es el caso de Harry Styles, quien luego de su show íntimo en mayo de este año, en junio pasado dio a conocer que regresaría a la Ciudad de México en junio de 2018.
Aún faltan casi más de dos meses para que 2017 llegue a su fin y la agenda musical del año entrante ya se comienza a llenar. Al menos ocho son los conciertos que se han agendado y todos fueron puestos a la venta con al menos ocho meses de anticipación, a diferencia del lustro pasado, cuando la mayoría se tomaban menos de seis meses para abrir la venta de boletos.
Así como el ex integrante de One Direction, The Killers, Sam Smith, Niall Horan, Bruno Mars, Depeche Mode, Lana del Rey y Mago de Oz han confirmado su asistencia a tierras mexicanas en recintos que van de la Arena Ciudad de México al Foro Sol.
Así, mientras hace 20 o 25 años era un suceso que llegaran Michael Jackson o Madonna, hoy se puede ver en un mismo año a Lady Gaga que a Britney Spears, a Justin Bieber y a U2 desfilar por este país.
“La oferta musical ha crecido a pasos grandes, antes venían sólo estrellas súper consolidadas o el fan tenía que viajar a otro país para ver su show favorito. El hecho de que México se encuentre actualmente en la agenda de los shows del mundo también hace que entre en una gran coordinación previa que puede en algunos casos hacer que tarde en llegar el espectáculo”, señaló Montserrat Reyna, experta en Administración Financiera de eventos musicales.
Para la especialista, aunado a esto, en muchas ocasiones el tour latinoamericano llega a ser el último para los artistas, lo cual no significa que se planee en pocos meses.
“Se arman con meses de anticipación, porque las grandes estrellas acostumbran a armar su tour con las ciudades incluidas desde un inicio, así que en ocasiones si Latinoamérica está al final de la gira, eventualmente tardará más en llegar el show, pero eso es algo que le conviene a la empresa que los lleva a cada ciudad porque puede anunciar el concierto con meses de anticipación”, explica.
Este factor , apunta Reyna, también beneficia al espectador, quien puede tener más posibilidades de comprar un ticket que, en ocasiones, por tratarse de talento internacional resulta ser más costoso que otros que se presentan con cotidianidad en el país.
“A veces saber que vendrá nuestro artista en cuestión con varios meses de antelación hace que tanto las empresas promotoras como algunos bancos pongan preventas y hasta meses sin intereses para que el público pueda adquirir sus entradas, lo cual hace más viable al público poder asistir”, señaló.
Otro elemento que se debe prever, dice, es la cotización del peso frente al dólar, que puede elevar los costos de la contratación del espectáculo si no se hace con suficiente tiempo.
“La cotización del dólar afecta el precio del showe en el país, pues al tratarse de espectáculos internacionales todo se paga regularmente en esta moneda”.
