Rafael Araneda, conductor oficial del Festival de Viña del Mar y quien se dio a conocer en México por estar a cargo de los programas «La academia» y «Desafío de estrellas», afirmó que no se considera el sucesor del afamado presentador Don Francisco.
Araneda viajó a México para estar en la presentación oficial del Festival Viña 2017, que se celebrará del 20 al 25 de febrero, y además de hablar sobre este evento musical que se lleva a cabo en la Quinta Vergara de Viña del Mar, compartió con Notimex que es un gran amigo y admirador del comunicador chileno Don Francisco.
«Estoy feliz de visitar nuevamente en México, un país que quiero mucho y que ahora nos recibe para presentar oficialmente el Festival Viña 2017, en el que México siempre ha tenido una presentación muy importante, gracias a la cantidad de estrellas con que cuenta», declaró.
Señaló que este es el séptimo evento que conduce y lo hace con mucho orgullo y con la misma emoción como si fuera la primera vez.
«Es un motivo de orgullo para mí estar ya por séptima ocasión en este evento, que también es un motivo de estrés porque uno busca que cada vez las cosas salgan de la mejor manera. Cada vez hay diferentes desafíos y la industria de las telecomunicaciones cada vez crece más, se diversifica y las multiplataformas nos desafían constantemente», dijo el presentador.
Por lo mismo, dijo que los festivales que se hacían en los años 80, no son lo mismo que los actuales.
«Hoy en día tenemos cobertura de radio, televisión, cadena, redes sociales, aplicaciones, ‘streamings’, tenemos lo que sucede detrás del escenario en el mismo momento, un público que lo comenta, lo baila y lo critica. Antes, no había esos desafíos y en esos desafíos estamos nosotros atendiendo a la prensa, que son casi 500 los que vienen de todo el mundo observando lo que sucede en nuestro país».
Sin embargo, pese a todo ese estrés que comenta, aseguró que es una experiencia muy bonita que nunca imaginó que llegaría a suceder.
«Es increíble, son las dos caras de la moneda, pero a veces en medio está el placer, el privilegio y la responsabilidad de estar ahí. El nerviecito y la emoción en el estómago no se quita y no tengo ningún pudor en reconocerlo, aquí hay tensión, hay adrenalina, pero sobre todo el privilegio de hacer algo maravilloso y ser parte de la historia de este festival que tanto nos enorgullece a los chilenos», señaló Araneda.
Añadió, que la emoción de estar frente a miles de personas le provoca una emoción indescriptible al momento enfrentarse al llamado «monstruo» de Viña del Mar.
«Es un motivo de felicidad el estar ahí, ver a tanta gente, que mi madre me acompañe, que mis hijos estén ahí, mi mujer, es una fiesta familiar y como tal la disfrutamos al máximo», platicó.
Dijo que uno de sus grandes recuerdos de su infancia los vivió con los festivales de Viña del Mar.
«Tengo las mejores imágenes de mi vida, al ver a mi padre cómo disfrutaba de los comediantes que se presentaban en el festival, su rostro de alegría y su sonrisa es imborrable, él ya murió, pero esos recuerdos no se me olvidan y me los regaló Viña y me los regaló cuando jamás pensé que algún día yo llegaría a conducirlo. Es la magia de la vida».
Además de preparar el evento anual de música, Rafael Araneda conduce, junto con Carolina de Moras, un programa matutino en la cadena Chilevisión.
«Es un programa matutino de cuatro horas de duración, todos los días del año, incluyendo Navidad y Año Nuevo, además tengo un ‘show’ de conversación con personalidades que pronto daremos a conocer y que va a llegar a muchos lados, y pues siempre buscando hacer muchas cosas dentro de este maravilloso mundo de la comunicación».
Dijo que aunque está considerado uno de los mejores conductores de su país, para nada se cree o se siente el sucesor de Don Francisco, tal como se ha comentado en algunos medios.
«Yo a Don Francisco lo respeto por sobre todas las cosas y creo que compararse con él hablaría de poca humildad de mi parte, porque hablar de Don Francisco es hablar de un grande de las comunicaciones.
«Yo soy un hombre que ha hecho su carrera a punta de mucho trabajo y esfuerzo y de eso me siento orgulloso y vivimos dos momentos distintos, experiencias distintas, él me lleva una experiencia de años, que a la hora de comunicar se nota y por lo tanto esas comparaciones me parecen injustas».
Afirmó que además a ambos les tocó dos tipos de televisión. «La televisión donde Don Francisco se formó era una televisión más romántica, donde no existían las redes, ni las plataformas, lo único que había era la televisión y la gente era lo único que veía, los ratings eran otros, en fin, los dos estábamos en otro mundo».
Finalmente, Rafael Araneda confesó que por lo pronto no tiene pensado salir de Chile, a pesar de lo bien que le fue en México y en Estados Unidos.
«Quiero hacer un tipo de televisión diferente y aportar algo a la televisión de mi país, quiero apostar más por la creatividad que por esos formatos donde todo mundo predice lo que va a suceder. Ese es el gran desafío porque las multiplataformas se están volviendo en un competidor muy fuerte».
