El recorrido a través del Mediterráneo desde el norte de África a Europa se ha hecho cada vez más mortal para quienes buscan asilo, desesperados por encontrar una mejor vida.
Casi la misma cantidad de migrantes ha muerto en el mar este año que todos los que murieron el año pasado, aunque muchos menos han intentado sobrevivir la arriesgada travesía, dijo la agencia de refugiados de las Naciones Unidas el martes.
“Esto es por mucho lo peor que hemos visto”, dijo el martes William Spindler, un vocero del alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Aquí se encuentran algunos motivos por los que el cruce del Mediterráneo se ha hecho cada vez más peligroso.
Los traficantes están utilizando métodos más peligrosos
El aumento drástico de muertes —3740 personas murieron esta semana— puede atribuirse en parte a las tácticas cambiantes que utilizan los traficantes. Están subiendo a miles de personas a la vez y utilizan botes menos aptos para navegar, incluyendo balsas inflables de hule que no duran todo el trayecto.
“El tráfico de personas se ha vuelto un gran negocio: se hace casi a un nivel industrial”, dijo Spindler a los reporteros.
Los traficantes están intentando incrementar sus ganancias y reducir el riesgo de ser detectados, dijo.
Los migrantes desesperados cruzan una y otra vez
Hasta el momento, este año 327.800 personas han cruzado el Mediterráneo; la cifra es cerca de la mitad de quienes cruzaron en el mismo periodo el año pasado.
La mayoría de los migrantes se están dirigiendo a Italia, desesperados por escapar del conflicto o la crisis en Nigeria, Eritrea y otros países africanos. Esperan que los regresen y hacer varios intentos para atravesar el Mediterráneo, dijo Joel Millman, un vocero de la Organización Internacional para la Migración.
Las autoridades y grupos de rescate no se dan abasto
Los traficantes están llevando al límite la capacidad de los servicios de rescate. La Marina Italiana y la Guardia Costera rescataron a más de 6000 migrantes en un solo día este mes y el lunes pusieron a salvo a más de 2200 en el transcurso de 21 operativos de rescate.
Entre los muertos más recientes se encontraban cuatro migrantes que al parecer se ahogaron después de que una lancha motora identificada como propiedad de la Guardia Costera de Libia atacó un bote de hule en el que viajaban cerca de 150 personas el viernes. Los tubos inflados del bote colapsaron y la mayoría de los pasajeros cayeron al mar.
La Guardia Costera de Libia ha negado cualquier participación en el incidente, pero Sea-Watch, una organización de rescate que recuperó cuatro cadáveres y rescató a cerca de 120 personas en el incidente, dice que la lancha motora llevaba la insignia de la Guardia Costera de Libia.
Fuente: NY Times