Los siete cementerios de Cuernavaca, Morelos, no cuentan con ningún espacio para sepultar a un nuevo difunto desde hace 15 años, aseguró Pablo Martín Talavera Camacho, director de Panteones del ayuntamiento de la ciudad.
Entrevistado en su oficina ubicada en el Panteón de La Leona, ubicado en la colonia La Carolina, el servidor público dio a conocer que la venta de espacios en los siete camposantos a su cargo terminó en 2010
Además de la necrópolis de La Leona, la capital morelense cuenta con otras seis en las colonias Tlaltenango, Antonio Barona, Teopanzolco, Chapultepec, Las Margaritas y Acapantzingo. Estos sitios cuentan en total con aproximadamente 24 mil fosas, pero ya todas están ocupadas o vendidas.
En el de La Leona, el principal cementerio de la urbe, detalló Talavera Camacho, hay 12 mil 800 sepulcros, pero todos ya tienen dueño e incluso algunos se han utilizado más de una vez. A este panteón y al resto no les cabe ni un muerto más.
Por la carencia de tumbas familiares de difuntos, sobre todo los que ya cumplieron más de siete años enterrados, vuelven a utilizar los espacios para sus nuevos muertos. En cada sepultura se pueden colocar hasta tres cuerpos.
Además, personas que compraron sepulcros con anterioridad y no los usaron, o los utilizaron décadas atrás, revenden los espacios a quienes acuden a cementerios a buscarlos, que pagan de 10 mil a 20 mil pesos o más, aseguraron unas mujeres requerían un sitio para un pariente.
Información de la mano con La Jornada
