A cinco meses de iniciada la lucha entre Chapiza y Mayiza se tiene registró de unas 923 personas asesinadas, entre ellas 32 mujeres, e incluyendo a quienes han fallecido en enfrentamientos y las que han sido encontradas en fosas.
Contando a partir del 9 de septiembre, fecha en que comenzó la guerra entre ambas facciones del Cártel de Sinaloa, han fallecido unos nueve militares en enfrentamientos con integrantes de ambos grupos y otros más en accidentes de tránsito.
Además, 23 elementos activos o retirados han sido asesinados, incluyendo agentes municipales, estatales y de investigación, y hasta un agente de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana que realizaba trabajos de inteligencia en Culiacán.
Se ha documentado 208 muertos, el primer mes (septiembre); 206, el segundo; 200, el tercero; 170, el cuarto, y 139, el quinto mes, lo que refleja una tendencia hacia la baja en homicidios dolosos, desde que inicio el conflicto.
Sin embargo, las últimas semanas se han caracterizado por ataques y quema de inmuebles, donde sólo se han registrado pérdidas materiales.
Adicionalmente, la Fiscalía del estado ha registrado denuncias por la desaparición de 636 personas sólo en Culiacán, durante este mismo periodo, pero no se ha detallado cuántas de ellas han sido localizadas con vida, muertas o que continúan en calidad de desaparecidas.
Las fuerzas federales dejaron de informar periódicamente sus resultados a partir del tercer mes, y hasta entonces, unos 50 muertos eran en enfrentamientos con militares, registrados en la FGR, y no contabilizados por las autoridades locales.
En los reportes de detenciones, se tienen al menos a diez colaboradores cercanos a los líderes de ambos grupos, entre ellos El Piyi, El Max, El Fantasma, El Güero Chompas, El Oso, El H, El Mero Mero, Crescencio, El Chavo Félix y Jando.
Excelsior