La contraloría de la Universidad Autónoma de Querétaro acreditó una serie de irregularidades en el manejo de recursos públicos, obtenidos a través del entonces Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, por un monto de 320 millones de pesos durante la administración 2012-2018 y por lo cual ya hay una carpeta de investigación ante la Fiscalía General de la República, informó el extitular de esta área José Ramírez Reséndiz.
Durante dicho periodo, el excontralor detalló que las irregularidades corresponden a 3 proyectos presentados para obtención de recursos del CONACyT, institución que se dedica a financiar proyectos de investigación científica y que mantiene convenios con la UAQ así como con todo el sistema de universidades públicas.
Explicó que los 3 proyectos tenían como principal concepto la realización de un software universitario, con lo cual los recursos obtenidos podían utilizarse bajo conceptos como: adquisición de equipo tecnológico, salarios y viáticos de profesores o estudiantes y requerían forzosamente la presentación del proyecto concluido, el cual no se dio a conocer.
Ramírez Reséndiz explicó que fue durante el 2020, bajo la rectoría de Teresa García Gasca, cuando se identificaron las irregularidades y se autorizó la presentación de la denuncia federal que aconteció el 2 de diciembre de dicho año, aunque 4 años después de dicha fecha no se han presentado mayores avances en la investigación.
En este sentido y dadas las fechas de las irregularidades, señaló que la UAQ podría verse involucrada en un esquema de triangulación de recursos como ocurrió con otras instituciones de educación superior a nivel nacional, en un caso denominado en su momento como «estafa maestra».
Alan García
