El 18 de diciembre de 2024, agentes de la Guardia Nacional de Texas dispararon bolas de pimienta contra un grupo de más de 150 migrantes que se encontraban en el bordo del Río Bravo, la frontera natural entre México y Estados Unidos. El incidente ocurrió en el marco del Día Internacional del Migrante y generó una nueva ola de tensión en la región.
El grupo de migrantes, en su mayoría provenientes de Centroamérica y Sudamérica, había sido engañado por falsas promesas en redes sociales, que les indicaban que podrían cruzar el muro fronterizo. Muchos de ellos se encontraban en la espera de poder ingresar a Estados Unidos para solicitar asilo.
Según relatos de los migrantes, los agentes de la Guardia Nacional utilizaron las bolas de pimienta para dispersarlos, luego de que, desde el lado mexicano, los migrantes intentaran avanzar hacia el muro en busca de una oportunidad para ingresar. Las autoridades estadounidenses justificaron su actuación señalando que los migrantes no acataron las órdenes de detener su marcha.
Wuiliany, una migrante del grupo, relató que, desde las primeras horas de la madrugada, ella y otros migrantes estaban siendo desplazados de un punto a otro sin poder avanzar. “Estamos desde las 2:00 horas de la madrugada caminando con frío, metiéndonos al agua. Ayer nos dijeron que abrirían la puerta 36, pero hoy nos mandaron a la 40”, indicó.
Por su parte, Edinson Hernández, un migrante venezolano, expresó su desesperación. «Nos dicen que si pasamos, nos lanzarán bombas», comentó, haciendo referencia a las advertencias de las autoridades estadounidenses.
Este incidente se produce en un contexto de creciente tensión en la frontera, donde miles de migrantes siguen intentando cruzar en busca de mejores condiciones de vida, mientras persisten los rumores sobre la política de deportaciones masivas impulsada por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
Activistas han criticado el uso de bolas de pimienta como una estrategia de contención, argumentando que solo agravan la crisis humanitaria en la región. Además, señalaron que la desinformación, especialmente en redes sociales y por parte de grupos criminales, sigue siendo un factor que confunde a los migrantes.
Ese mismo día, la Patrulla Fronteriza del sector de El Paso desmintió los rumores que circulaban en las redes sociales sobre la apertura de puertas en el Día Internacional del Migrante. Las autoridades pidieron a la comunidad migrante que ignorara la información errónea que circula, advirtiendo sobre los peligros de creer en noticias falsas, incluidas las relacionadas con posibles cruces ilegales.
Mientras tanto, muchos migrantes, incluidos varios venezolanos, continúan con la esperanza de que las puertas se abran en la ciudad fronteriza de Juárez, donde algunos esperan ser recibidos del lado estadounidense.
Información de la mano con El Universal