Hubo un tiempo en que Lions eran el equipo al que todos querían enfrentar. Con una historia marcada por la mediocridad y las derrotas, Detroit era poco más que un obstáculo menor en el camino de los grandes de la liga. Sus pocas temporadas exitosas eran eclipsadas por largas rachas perdedoras y la incapacidad de mantener el talento en su plantilla. Packers, en particular, disfrutó de una ventaja en esta rivalidad, acumulando victorias con una regularidad casi aburrida.
Pero algo cambió en Detroit. Con un enfoque renovado en el draft, una dirección firme y la adquisición de jugadores clave, Lions reconstruyó su identidad desde los cimientos. El entrenador Dan Campbell fue una figura central en esta metamorfosis, infundiendo en el equipo una mentalidad de lucha y resiliencia. Ahora, Detroit lidera la NFC Norte y se perfila como uno de los equipos más fuertes de la conferencia. Detroit acumula 10 victorias en fila e intentará poner una marca de franquicia
Lions han ganado 10 partidos consecutivos, igualando la racha más larga en la historia de la franquicia (1934). Con una ofensiva explosiva que promedia 395.2 yardas por juego, liderada por Jared Goff y su conexión letal con Amon-Ra St. Brown, Detroit ha dejado atrás los días de ser un oponente fácil. Su defensa, aunque no perfecta, ha mostrado mejoras significativas.
Packers busca venganza. La última vez que estos equipos se enfrentaron, Lions salió victorioso en Lambeau Field en la Semana 9, con un marcador de 24-14. Green Bay, por su parte, ha encontrado su propio ritmo con tres victorias en fila. Desmanteló a San Francisco 49ers, y dominó a Dolphins en Thanksgiving.
clm
