En la provincia de Kwango, en el suroeste de la República Democrática del Congo (RDC), al menos 143 personas han muerto desde noviembre debido a una enfermedad desconocida.
Los afectados presentan síntomas similares a los de la gripe, como fiebre alta y dolores de cabeza severos, según autoridades locales. La falta de acceso a servicios médicos y medicamentos ha complicado la situación en la zona rural de Panzi, donde muchos enfermos fallecen en sus hogares sin tratamiento adecuado.
Un equipo médico fue enviado para recolectar muestras y realizar análisis que ayuden a identificar la enfermedad.
Tanto el vicegobernador de Kwango, Remy Saki, como el ministro de Salud provincial, Apollinaire Yumba, señalaron que mujeres y niños son los grupos más afectados. Las autoridades y la Organización Mundial de la Salud (OMS) trabajan para contener el brote, aunque enfrentan múltiples desafíos logísticos y de recursos.
La situación es extremadamente preocupante, ya que el número de infectados sigue aumentando, dijo a Reuters el líder de la sociedad civil Cephorien Manzanza.
Los enfermos mueren en sus propias casas por falta de tratamiento, dijeron Saki y Yumba.
Un epidemiólogo local afirmó que las mujeres y los niños son los más afectados por la enfermedad.
Un portavoz de la OMS dijo el martes que la agencia sanitaria de la ONU había sido alertada de la presencia de la enfermedad la semana pasada y que estaba trabajando junto con el Ministerio de Salud Pública del Congo para realizar nuevas investigaciones.
Con información de Excélsior