En los momentos de definición, Tyler Bass se sobrepuso a los nervios y conectó un gol de campo con el que mandó Bills al frente para terminar por vencer 23-20 a Jets, que falló un par de patadas.
Bass no tuvo problemas para mandar entre los postes un intento de 22 yardas cuando restaban 3:43 minutos en el cuarto final; poco antes Greg Zuerlein había fallado intentos de 41 y 60 yardas por los Jets, cuando estaban igualados a 20.
Josh Allen tomó la ofensiva en medio campo para llevarla hasta la yarda 33; un castigo le dio la opción a Bass de hacer un intento más corto que no falló, con la patada que no hizo buena de 48 yardas en la primera ofensiva del tercer periodo.
Allen se impuso en el particular duelo de QB al veterano Aaron Rodgers luego de completar 19 de 25 intentos para 215 yardas y un par de espirales de anotación con Mack Hollins de ocho yardas y Dawson Knox de 12 en el segundo cuarto. El mariscal de Buffalo también logró un TD en un acarreo de una yarda a la mitad del primer periodo.
Rodgers había sido muy efectivo en la conducción del ataque neoyorquino, logró el primero de sus dos pases de anotación con un envío de cinco yardas con Garrett Wilson en los últimos minutos del primer periodo; al expirar la primera mitad conectó el segundo con Allen Lazard con un envío de 52 yardas. Terminó con 296 yardas tras completar 24 de 36 pases.
El veterano QB de Jets tuvo una última oportunidad en busca de siquiera igualar el partido, pero la ilusión se fue al pozo luego de sufrir una intercepción de Taron Johnson sobre el filo de la pausa de los dos minutos, con lo que Bills se aseguró mantenerse en la cima de la División Este de la Conferencia Americana.
clm
