El partido de la Europa League entre la Real Sociedad y el Anderlecht belga en el Reale Arena de San Sebastián se tuvo que detener durante varios minutos en el primer tiempo por culpa de la violencia de la afición visitante, que rompió una pantalla de seguridad y lanzó butacas a los seguidores vascos.
Los incidentes ocurrieron cerca de la media hora de encuentro, coincidiendo también con el 1-1 de los belgas, y se alargaron durante varios minutos. Los seguidores radicales del Anderlecht, unos 300 situados en torno a un perímetro de seguridad, destrozaron una de las pantallas de metacrilato para lanzar objetos, en su mayoría, butacas que arrancaron de su sitio.
La afición ‘txuri-urdin’ situada en la grada inferior tuvo que abandonar sus localidades y solicitar un cambio al club. El resto del estadio reprochó y abucheó a los belgas tras su actuación, con silbidos durante esos minutos de tensión, hasta que finalmente actuó la Ertzaintza (policía del Páis Vasco). Ante la escalada de tensión, el árbitro rumano Barbu paró el partido.
Los jugadores del Anderlecht Colin Coosemans y Theo Leoni acudieron a la esquina donde estaban sus seguidores para pedir calma y el encuentro se reanudó tras varios minutos parado en el 35 de encuentro. Los radicales del Anderlecht ya habían dejado su sello en los aledaños de Anoeta, antes del partido, y por las calles de San Sebastián, con bengalas y una alta excitación previa al duelo.
LA VIOLENCIA OPACÓ LA VICTORIA DEL ANDERLECHT
En lo meramente deportivo, la Real Sociedad sigue sumida en la irregularidad. Después de la victoria en Liga ante el Valencia el pasado fin de semana, los vascos finalmente perdieron este jueves en Europa League ante el Anderlecht en San Sebastián por 2-1 en la 2ª fecha de la Europa League, donde los belgas sacaron provecho de lo ocurrido en las gradas para remontar.
Una derrota que se une al empate en la primera fecha ante el Niza y que deja a los hombres de Imanol Alguacil en la zona baja de la segunda competición europea, en la que deberán mejorar si quieren clasificarse a octavos de final.
El delantero argentino Luis Vázquez (28) y el belga Theo Leoni (39), también de gran volea con la diestra, dieron tres nuevos puntos a un equipo belga que ya había ganado en su estreno ante el Ferencvaros (2-1).
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