El Papa Francisco dijo que “estamos destruyendo el mundo» en un mensaje transmitido por la clausura de un foro por la paz de la comunidad Sant’Egidio, que se celebró en París.
«Ya estamos destruyendo el mundo. ¡Detengámonos mientras estemos a tiempo!», exhortó.
«Debemos rezar por la paz» ante «el riesgo de que los numerosos conflictos, en lugar de cesar, se ensanchen peligrosamente», insistió el Papa.
Su mensaje se leyó durante la ceremonia de clausura del 38º «Encuentro internacional por la paz» de Sant’Egidio, una comunidad católica próxima al Vaticano, que reunió desde el domingo, en París, a decenas de dignatarios religiosos, expertos, personalidades de la cultura y de la sociedad civil y políticos.
Fundada en 1968, la comunidad Sant’Egidio, presente en más de 70 países, se ha convertido en uno de los canales de la «diplomacia en la sombra» de la Santa Sede y ha sido particularmente activa en África y América Latina.
«Demasiadas veces en el pasado las religiones han sido utilizadas para alimentar conflictos y guerras, un peligro que sigue acechando hoy», advirtió el papa.
Las religiones no deben «convertirse en un instrumento para alimentar nacionalismos, etnicismos, populismos», insistió Francisco. «¡Ay de aquellos que intentan arrastrar a Dios a tomar parte en las guerras!», agregó.
Durante el acto se guardó un minuto de silencio por las víctimas de las guerras y los líderes religiosos encendieron velas.
Excelsior