El actor surcoreano Yoo Ah-in, conocido por sus papeles en «Burning» o «Hellbound«, fue condenado a un año de prisión por consumo habitual de drogas.
La Fiscalía, que pedía para él cuatro años de reclusión, lo acusaba, entre otras cosas, de consumir propofol, un anestésico usado en procedimientos médicos, de manera ilegal en más de 180 ocasiones entre 2020 y 2022.
También sostenía que el intérprete de 38 años compró más de mil pastillas para dormir usando recetas médicas prescritas a otras personas, o que consumió marihuana durante una estancia en EU.
Las leyes sobre estupefacientes en Corea del Sur son draconianas, e incluso castigan su consumo cuando se produce fuera del territorio nacional.
Otros cargos contra el actor
Además de la pena de cárcel, el tribunal condenó al actor a pagar una multa de 2 millones de wones (unos 29 mil 500 pesos).
En vistas previas, Yoo, cuyo verdadero nombre es Uhm Hong-sik, había asegurado que sufría de depresión, ansiedad e insomnio debido a la presión que sentía por ser una celebridad en su país.
El tribunal del Distrito Central de Seúl que lo condenó subrayó su dependencia de todas estas sustancias y consideró que muy probable que vuelva a consumir drogas si queda en libertad.
Tras ser leída la sentencia, el actor, que lució corbata y traje negro y se mostró poco expresivo, fue trasladado a prisión.
Sobre Yoo pesa además una investigación policial en curso después de que un hombre lo denunciara este verano por supuestamente violarlo mientras estaba inconsciente.
Con información de Milenio.