El municipio de Chalco, en el Estado de México, lleva casi un mes bajo aguas residuales debido a una serie de inundaciones que se agravan con cada lluvia.
Expertos señalan que más allá del impacto del cambio climático, el problema radica principalmente en la falta de infraestructura hidráulica adecuada para gestionar las aguas pluviales.
Según la oficina de comunicación social del ayuntamiento, se estima que alrededor de 600 viviendas han sido afectadas, afectando a aproximadamente 2,000 personas. No obstante, estas cifras podrían aumentar cuando se complete el censo que realiza la Secretaría de Gobernación.
Humberto Juan Francisco Marengo Mogollón, subdirector general técnico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), afirmó que Chalco nunca debió haberse desarrollado como zona habitacional desde la administración del expresidente Carlos Salinas, debido a la falta de un sistema de drenaje adecuado.
«Ni las autoridades de entonces ni las actuales han invertido en ello», declaró.
Jesús Campos López, vicepresidente técnico del Colegio de Ingenieros Civiles de México (CICM), criticó que las autoridades del Valle de México solo actúen ante emergencias en lugar de tomar medidas preventivas.
«Las inundaciones en Chalco no son resultado del cambio climático, sino de la falta de capacidad de drenaje para manejar el agua. Sin una regulación efectiva, seguimos exponiendo a la población a riesgos innecesarios», explicó.
Principales causas de inundación
Mauricio Jessurun Solomou, presidente del Consejo Directivo del Colegio, agregó que los desastres naturales ocurren cuando eventos como lluvias intensas afectan a comunidades vulnerables sin infraestructura adecuada para mitigar los daños. Subrayó la importancia de modernizar y mantener la infraestructura existente y complementarla con nuevas tecnologías.
Marengo también señaló que una de las principales causas de inundación en el Valle de México es el desarrollo urbano intensivo y la modificación del uso del suelo, lo que, combinado con la baja capacidad de drenaje y falta de infraestructura de protección, ha llevado a daños significativos en viviendas y vías de comunicación.
César Herrera, coordinador del Comité del Agua del Colegio, sugirió que la inversión público-privada podría ser una solución para financiar la infraestructura hidráulica necesaria.
«Proyectos con inversión mixta podrían ayudar a controlar inundaciones en áreas urbanas y mejorar la plusvalía de los terrenos», añadió.
El Economista