Reconocimiento internacional
El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) aplaudió la reciente decisión de México de prohibir las llamadas «terapias de conversión de homosexuales». La nueva ley, que entró en vigor el fin de semana pasado, fue recibida con elogios por parte de ONUSIDA por su contribución a la salud pública y los derechos humanos.
«La decisión de México de poner fin a esta práctica nociva contribuirá a garantizar la salud pública. Todos los países deberían seguir el ejemplo de México», declaró Luisa Cabal, directora regional de ONUSIDA para América Latina y el Caribe.
Detalles de la ley
La ley, ratificada por la Cámara de Diputados y el Senado, impone penas de dos a seis años de prisión a quienes realicen «terapias de conversión sexual«, que buscan obligar a las personas a cambiar su orientación sexual o identidad de género. Las sanciones se agravan si el infractor es un familiar, tutor, empleador, docente, médico o funcionario público en relación con la víctima, pudiendo incluir destitución e inhabilitación para desempeñar cargos públicos.
Un avance para la diversidad sexual
La prohibición de las «terapias de conversión» es otro avance legal significativo para la diversidad sexual en México, donde, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), alrededor de 5 millones de personas se identifican como parte de la comunidad LGBTI.
Información de la mano con El Universal