La nueva puesta en escena de la autoría de José Manuel López Velarde se estrena en junio y plantea el sueño de Micky, un adolescente que desea ser rockero
El montaje de La vida es mejor cantando es una expansión de Mentiras, el musical. El personaje de Dulce se convierte en la protagonista de la historia, y muestra su faceta como profesora en una escuela secundaria con divertidas aventuras en el proyecto de Gou Producciones, Bobo Producciones y La Teatrería.
La obra para toda la familia nació de la pluma de José Manuel López Velarde como una necesidad de contar una historia con las canciones de los primeros discos de Timbiriche.
“Quería hacer un musical con canciones que pudiera unir a dos generaciones: los papás y los abuelos con los más jóvenes para tener algo en común, para escuchar y platicar; el objetivo es tender puentes, es la temática de esta obra que trata de lo que significa crecer y lo que pasa con tus sueños cuando te vuelves adulto”, explicó el autor.
Dulce, protagonista
López Velarde decidió que el personaje de Dulce fuera el eje conductor en la historia porque al tener alumnos, podía darse este vínculo entre generaciones.
“El elenco es espectacular, está integrado por 20 personas muy talentosas y jóvenes; para algunos esta es su primera incursión profesional. Hicimos una audición abierta, participaron 406 personas, 99% del elenco surgió de la audición, están aquí por su talento y cualidades”, aseguró el autor.
Mientras que Ari Borovoy, quien forma parte de la producción, comentó la ilusión que le hace llevar esta historia a escena.
“Este musical en particular me ilusiona mucho porque se convierte en un semillero muy importante de talento, aunque no son muy conocidos, estoy seguro de que con el talento que nos han mostrado van a tener una trayectoria muy interesante”, agregó el productor.
La historia
La obra aborda la vida de varios estudiantes de secundaria, que tienen la guía y apoyo de Miss Dulce. Micky, uno de los chicos de los grados más avanzados, está por terminar sus estudios y tiene el sueño de convertirse en rockero; su mejor amiga Chispita lo anima, mientras se hace cargo de un gato callejero. En una caminata acompañados del felino, encuentran un disco de vinilo de Timbiriche, y esto les cambia la vida.
