Vecinos de la colonia El Capulín, en la alcaldía Álvaro Obregón, se han manifestado por segundo día consecutivo en contra de las obras del Tren Interurbano México-Toluca, las cuales han causado daños a sus viviendas.
Los residentes, encabezados por el representante vecinal Juan Barrera, exigen que el Gobierno de la Ciudad de México realice dictámenes estructurales en más de medio centenar de casas y se comprometa a responder por los daños ocasionados por la construcción y posterior operación del tren.
Los colonos han realizado una clausura simbólica en el tramo de la presa Tacubaya, donde una lanzadora de dovelas, de 200 metros de longitud y 800 toneladas de peso, se deslizó y cayó en abril pasado. Con altavoces en mano, han pedido a los trabajadores que se retiren de la zona y a quienes llegaban, que no ingresen a laborar.
Barrera señaló que los vecinos han aceptado la mesa de diálogo propuesta por las autoridades capitalinas, donde estarán presentes el secretario de Gobierno, Ricardo Ruiz, y representantes de otras dependencias, así como de las empresas responsables de los frentes 23 y 24 del viaducto elevado del Tren Interurbano.
Según el representante vecinal, los residentes de las colonias Santo Domingo, Ampliación Acueducto y algunos de Liberales de 1857 se han unido a las protestas. Por su parte, los habitantes de Liberales de 1857 han informado que siguen en mesas de diálogo con las autoridades, realizando recorridos y visitas a domicilios para revisar los daños.
Las autoridades han informado que será a mediados de junio cuando posiblemente se retire la lanzadora, luego de que se realicen las maniobras con grúas, una vez concluidos los peritajes que elaboró la Fiscalía General de Justicia.
Información de la mano con La Jornada
