El Reino Unido ha superado el último obstáculo para implementar su plan de enviar a Ruanda a los inmigrantes indocumentados.
Después de meses de debates y deliberaciones, el Parlamento británico aprobó el lunes por la noche una ley que designa al país centroafricano como un destino «seguro» para trasladar solicitantes de asilo y extranjeros que hayan llegado irregularmente a las islas británicas.
El primer ministro, Rishi Sunak, describió la iniciativa como un «cambio fundamental» en el enfoque global hacia la migración, argumentando que disuadirá a personas vulnerables de intentar llegar al país desde la Europa continental en embarcaciones.
Sin embargo, la oposición, activistas de derechos humanos y las Naciones Unidas han criticado el plan, argumentando que viola los tratados internacionales vigentes en materia de asilo y refugio.
Pocas horas después de la aprobación de la ley, las autoridades informaron que cinco inmigrantes ilegales perdieron la vida mientras intentaban cruzar el Canal de La Mancha en pequeñas embarcaciones.
Información de la mano con BBC News
