El Grupo Freixenet ha solicitado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor que afectaría hasta 615 trabajadores de Freixenet S.A. y de Segura Viudas S.A.U. La intención de la compañía es ponerlo en marcha a partir del mes de mayo y su intensidad dependerá de la evolución de las causas que lo motivan, la sequía.
Así, la empresa asegura que la medida se toma como «ejercicio de responsabilidad» para poder garantizar el funcionamiento del negocio y preservar la empleabilidad, así como para poder frente a los problemas que la grave escasez de agua está produciendo en el negocio.
Por este ERTE, motivado por la falta de materia prima debido a la fuerte escasez de uva, se verían afectados entre un 20 y 70% de la plantilla, dependiendo del área de actividad y de la época del año en que se efectúe. Se trata, así, de una de las primeras empresas en Cataluña que pide acogerse a un ERTE debido a la situación de emergencia que vive por la sequía.
La compañía ha iniciado el proceso ante el Departamento de Empresa y Trabajo de la Generalitat de Cataluña, que debe autorizarlo y ya lo ha trasladado a la representación social de los trabajadores con quienes debe negociarlo.
Precisamente, Henkell Freixenet dio a conocer la semana pasada los resultados financieros de 2023 y cifró la facturación en 1.230 millones de euros de facturación, un incremento del 4,1% respecto al ejercicio anterior. La firma vinícola destacó un crecimiento del 6% en el caso de espumosos, un segmento de negocio donde la compañía es líder a nivel nacional.
Pese a ello, también manifestó su «preocupación» por la falta de uva. «Viendo que la demanda mundial de cava está creciendo y que no podemos producir suficientes botellas para satisfacerla adecuadamente a corto plazo, la situación será realmente complicada en todos los niveles», aseguró Pedro Ferrer, co-CEO de Grup Freixenet.
Infobae