El ejército ucraniano ha anunciado la expulsión de las fuerzas rusas del suburbio estratégico de Makariv, en Kiev, después de un intenso enfrentamiento. La batalla continúa por otros tres suburbios: Bucha, Hostomel e Irpín.
El lunes, este último quedó en ruinas tras ser bombardeado, resultando en la muerte de ocho personas, según los servicios de emergencia. Rusia ha reclamado la responsabilidad del ataque, afirmando que el centro comercial se utilizaba para almacenar sistemas de cohetes y municiones.
La presencia de cadáveres, todos ellos hombres con equipamiento militar, sugiere que algunos soldados podrían haber estado durmiendo en el lugar durante el bombardeo. El centro comercial Retroville, inaugurado a principios de 2020, era un importante punto de consumo con 250 tiendas, cines y tres mil lugares de estacionamiento.
Kiev devastado
Sin embargo, la parte sur del complejo comercial quedó devastada por el ataque enemigo, que también provocó un incendio en el estacionamiento y en el interior del edificio, siendo este el mayor ataque registrado en la capital. Kiev ha sido blanco de numerosos ataques en la última semana, incluido uno el domingo pasado contra un edificio residencial que dejó cinco heridos.
La fiscalía ucraniana ha señalado que el balance total de víctimas mortales y heridos en la capital sigue siendo incierto, mientras equipos de rescate y fuerzas del orden trabajan para documentar lo sucedido.
A raíz de los bombardeos rusos que destruyeron el centro comercial Retroville, Kiev ha mantenido un toque de queda de 35 horas que comenzó a las 20:00 (hora local) del lunes pasado.
Información de la mano con Exelsior