El Papa Francisco durante su audiencia pública semanal en el Vaticano dijo que todavía se encuentra mal y pidió a un ayudante que leyese sus comentarios un día después de cancelar un viaje al extranjero.
El pontífice argentino, se levantó brevemente al inicio del acto en un auditorio del Vaticano y se santiguó antes de sentarse.
Con una voz suave, poco más que un susurro, Francisco dijo a los asistentes que “como no estoy bien”, la lectura de su discurso no sonaría “bonita”.
Entonces entregó el discurso impreso a un ayudante mientras permanecía sentado en el escenario.
Destacar que el Vaticano anunció el martes que los médicos pidieron al Papa, que padece una inflamación pulmonar que le causa problemas respiratorios, que cancelase un viaje de tres días para asistir a la conferencia climática de Naciones Unidas, conocida como COP28, en Dubái.
El viaje habría comenzado el viernes y el papa habría estado de regreso en Roma el domingo.
El anuncio de la Santa Sede apuntó que el estado de salud del pontífice había mejorado aunque sufría una gripe y una “inflamación de las vías respiratorias”.
Francisco, que ha hecho del cuidado del medio ambiente una prioridad de su papado, quería participar de algún modo en la Conferencia de las Partes en Emiratos Árabes Unidos, según el Vaticano.
No estaba claro si podría leer su discurso por videoconferencia o estar presente de alguna otra forma.
Según el Vaticano, el pontífice aceptó el pedido de los doctores “con gran pesar”.
El Papa estuvo hospitalizado a principios de año para recibir tratamiento intravenoso con antibióticos para tratar lo que el Vaticano reportó como una bronquitis.
De acuerdo con la Santa Sede, el Papa está recibiendo antibióticos por vía intravenosa para curar la gripe.
En una aparición televisada el domingo se podía ver una cánula intravenosa en su mano derecha. Francisco se sometió a un TAC en un hospital de Roma el 25 de noviembre que descartó que sufriese neumonía, apuntó.
Con información de AP News.