España anunció el endurecimiento de las restricciones para el consumo de agua.
Lo anterior se debe a la sequía prolongada que ha pasado; las autoridades catalanas dijeron que Barcelona tal vez necesite que le traigan agua potable en barco en los próximos meses.
Cataluña padece la sequía más grave desde que se llevan registros. Los embalses que surten agua a 6 millones de personas, incluidos los habitantes de Barcelona, tienen apenas un 18% de su capacidad.
Esto en comparación, los embalses del resto de España están llenos al 43% de su capacidad.
Las autoridades españolas y los expertos atribuyen la prolongada sequía en Cataluña al clima cada vez más cálido y seco.
Barcelona ya depende de la planta desalinizadora más grande de Europa para su agua potable y de una planta de tratamiento y purificación de aguas servidas para compensar el desabasto en pozos y ríos.
Cataluña entró oficialmente en la etapa de “preemergencia” para sequía, que reduce el consumo diario de 230 a 210 litros por persona.
Eso incluye tanto el consumo personal como lo que los ayuntamientos usan por habitante para los servicios. Según la Agencia Catalana del Agua, el promedio de consumo hogareño es de 116 litros diarios por persona.
Se prohíbe en la actualidad a los gobiernos municipales utilizar agua potable para el lavado de las calles o el riego de los parques. Se han elevado los límites para el consumo industrial y agrario.
Cuando las reservas hídricas sean menores a 16%, Cataluña declarará la “emergencia” y limitará el consumo de agua a 200 litros diarios por persona y podría reducirlo a 160 litros, y el uso para el riego agrícola requeriría autorización previa.
Las autoridades advierten que la “emergencia” podría llegar en cuestión de semanas, a menos que llueva, y mucho.
Si no llueve, Barcelona podría requerir el transporte de agua potable en buques cisternas, una medida extremadamente cara ya utilizada durante una sequía en 2008.
“Desgraciadamente, tenemos que estar preparados para todas las situaciones y, sí, estamos cerca de tener que utilizar barcos para llevar agua si la situación continua como en los últimos meses”, dijo el presidente regional Pere Aragonès durante una visita a Corea del Sur.
Aragonès dijo que su gobierno, juntamente con el Ministerio para la Transición Ecológica de España, se prepara para la eventualidad de los buques cisterna. Añadió que su gobierno preferiría traer agua para el sur de Cataluña en la desembocadura del río Ebro en el Mediterráneo.
Con información de AP News.