La diputada, Ana Paola López Birlain invitó a los padre de familia a considerar, a sumarse e involucrarse en tareas que abonen al fortalecimiento de valores cívicos y morales, así como a la seguridad en las instituciones educativas.
“La prevención se puede consolidar a través de inculcar una educación que se encamine al respeto y a la no violencia en ninguna de sus modalidades, ya que con esto podemos evitar que existan tragedias como muchas que han ocurrido en nuestro país, y por ello es necesario invitar a la comunicad escolar como directores, maestros, alumnos, padres de familia y autoridades a que en conjunto trabajemos en estrategias para promover una sociedad en paz y libre de violencia” comentó la Legisladora.
López Birlain expresó que derivado de inquietudes de algunos padres de familia sobre la seguridad en las escuelas por el caso ocurrido recientemente en San Isidro Miranda en el municipio de El Marqués, existe la posibilidad de implementar protocolos en materia de seguridad educativa.
Esto debido a que la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que la inconstitucionalidad del programa “Mochila Segura” no impide que las comunidades escolares que así lo decidan, lleven a cabo acciones que hayan sido diseñadas a través del diálogo y en consenso y no obligatorios que incluyan la revisión de las pertenencias de los alumnos.
Siempre y cuando dichos esquemas respeten la oposición de quienes no acepten sujetarse a dichas medidas.
“Es decir, mientras los padres de familia y la comunidad escolar se pongan de acuerdo y lo aceptan como medida para prevenir este tipo de hechos, es posible que se puedan llevar a cabo, y aquí es en donde cabe resaltar que la prevención a través de ciertos mecanismos son tan valiosos para privilegiar y fomentar la cultura de paz” comentó la diputada local.
La legisladora exhortó a las autoridades y comunidad educativa a trabajar en conjunto para coadyuvar en la creación de estos protocolos, para que la propia secretaría de educación emita los lineamientos.
Para que sirvan como base para su elaboración y así procurar el derecho de los alumnos a entornos seguros y que las instituciones educativas que así lo determinen adapten estos protocolos dependiendo su tipo y el nivel educativo que se cursa, para que puedan cumplirse.
No sin antes coincidir con los padres de familia para que se puedan involucrar y ser parte clave para el cumplimiento de estos mecanismos
