“El colapso climático ha comenzado”, lamentó este miércoles el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, en un comunicado, en reacción al anuncio del récord mundial de temperaturas durante este verano en el hemisferio norte.
Canículas, sequías, inundaciones o incendios azotaron durante ese verano boreal Asia, Europa y América del Norte, en proporciones dramáticas y a veces inéditas, con pérdidas de vidas humanas y grandes daños en las economías y el medioambiente.
La reacción de Gueterres se dio después de que el observatorio europeo Copernicus anunció este miércoles que 2023 será probablemente el año más caluroso de la historia. Y es que, las temperaturas medias mundiales durante los tres meses del verano boreal (junio-julio-agosto) fueron las más elevadas desde que se tiene registro.