China suspendió la publicación de estadísticas sobre desempleo juvenil, el mismo día en que salieron varios indicadores que suscitaron preocupación por el estado de la segunda economía mundial.
La Oficina Nacional de Estadística reportó que la tasa de desempleo global creció en julio a 5.3 por ciento, una décima por encima del mes anterior.
También se expuso un crecimiento de 2.5 por ciento de las ventas minoristas, por debajo de las expectativas de los analistas.
Además de un aumento de la producción industrial de 3.7 por ciento, inferior a 4.4 por ciento registrado en junio.
Por la suspensión de la publicación del desempleo juvenil, el banco central chino rebajó un tipo de interés crucial para intentar estimular el crecimiento.
China puede enfrentar problemas para cumplir el objetivo de crecimiento de 5 por ciento anual fijado para 2023, uno de los más bajos de las últimas décadas.
En el primer semestre del año, el producto interno bruto (PIB) de la segunda economía mundial sólo creció 0.8 por ciento, según datos oficiales.
Barclays recortó su previsión de crecimiento del PIB de China para 2023 a 4.5 por ciento desde 4.9 por ciento debido a un deterioro más rápido de lo anticipado en el mercado inmobiliario, dijeron analistas del banco.
“Nuestra previsión de crecimiento del PIB para 2023 ya se sitúa en el límite inferior de las previsiones de los analistas, pero creemos que el impulso de crecimiento más débil de lo previsto en los principales indicadores económicos sugiere que nuestra previsión de una expansión de 4.9 por ciento este año es cada vez más difícil de alcanzar”, dijo Barclays.
Con información de La Jornada.