La Leagues Cup reta a la historia y también a la lógica. Por primera vez un torneo internacional detiene dos ligas de diferentes países. En la simbiosis de México y Estados Unidos se mezclan críticas, señalamientos y cuestiones económicas que parecen superar a lo deportivo.
En ese sentido, Mikel Arriola, presidente ejecutivo de la Liga MX, defiende el génesis del torneo y apela a la ventaja que tendrá al ser visto internacionalmente.
Es la primera vez que se detiene una liga, no sólo la mexicana, sino también la de Estados Unidos. La Leagues Cup es el torneo que por primera vez en el mundo confronta a todos los equipos de una liga contra todos los de otra, es un formato de 77 partidos, tres países y un campeón en un mes… va a ser algo único”.
El torneo mexicano inició el 30 de junio y tras tres fechas detiene su camino para enfocarse a la Leagues Cup. En el caso de Estados Unidos, la MLS comenzó el 25 de febrero y a la mitad de la competición ha frenado por este evento.
Se hace en un momento en que las demás ligas del mundo están paradas o en pretemporada, eso hace que volteen a vernos, es una ventana internacional de un torneo oficial”, aseveró Arriola a Excélsior.
El vistoso cartel que anuncian los directivos, sin embargo, no emociona a los aficionados. Muchos de ellos se rascan la cabeza sin entender el formato. Son 15 grupos de tres equipos en los que sólo uno de cada sector quedará eliminado, aunado a que los empates no existirán, ya que de tener alguno, se jugarán penales y al ganador en este caso no se le darán tres puntos, sino dos. La confusión es tremenda, pero también la expectativa.
Algunos técnicos y jugadores han reclamado la razón de este torneo. Ricardo Ferretti de Cruz Azul o Miguel Layún, por ejemplo, han mostrado malestar por las reglas que a todas luces dañan a los equipos mexicanos.
Todas las voces son respetables. El torneo necesita de cosas por revisar, pero sólo cuando se realice se podrán mejorar, al mismo tiempo es una vitrina al mundo, porque todos voltearán a vernos. Esta primera edición arrojará un balance, sin embargo, lo más importante es lo deportivo y en ese aspecto es difícil que igualen a la Leagues Cup porque tenemos a Lionel Messi con el que abrimos el torneo, simplemente con eso todos los ojos del mundo estarán siguiéndonos”.
A pesar de esto, Messi jugará para la Liga de Estados Unidos por lo que el beneficio para México es mínimo, pero Arriola manifiesta que los jugadores de Cruz Azul podrán ser seguidos si hacen un buen certamen.
No es un torneo improvisado, lo venimos platicando desde hace dos años con los directivos de clubes, han podido analizarlo. Vamos a jugar contra una liga que crece un 20 por ciento cada año, o sea que beneficio, habrá”.
*Arriola viene de una familia de pelotaris, el jai-alai es su pasión.
PRESIDENTE PELOTARI
No pierde la sonrisa Mike Arriola cuando entra a este lugar. El Frontón México es como una estancia particular de su hogar. Anda por todos lados con el conocimiento que da saber los recovecos de un sitio familiar. Lleva la chamarra de la Liga MX, pero por debajo, la piel sigue siendo la misma, la de un pelotari de jai alai.
Son dos pasiones de la misma intensidad: el futbol y el Jai Alai. Los 18 clubes de la Liga MX son mi preocupación, pero me queda claro que mi origen es el Jai Alai”.
Conocido también como Cesta Punta, este deporte vasco eleva las raíces de esa zona. Jai Alai en euskera significa fiesta alegre y eso es precisamente lo que ha movido a Mikel Arriola en su vida, aunque ahora viva del futbol.
Este frontón para mi es familiar. Mi abuelo, Salvador Arriola, lo inauguró en 1929. Él venia del País Vasco, de Euzkadi. A mí me tocó reinaugurarlo en marzo de 2017 cuando tenía 42 años, después de que estuvo 20 años cerrado, entonces verlo con vida de nuevo me hace sentir la felicidad de que muchos chicos verán cesta punta”.
Y lo de ser pelotari le viene de las entrañas, por más que su camino se haya conducido por gestiones administrativas, ya sea en la política o ahora en la Liga MX. En sus buenos tiempos jugaba como delantero.
Mi padre fue amateur, pero en la familia tenemos estas raíces vascas. Yo, en cambio, jugué 27 años con Selección Nacional Mexicanas fui a siete mundiales, dos de ellos juveniles. Tengo seis medallas de oro y una de plata de Juegos Panamericanos”.