Se ha reportado la desaparición, en el Océano Atlántico, de un submarino a 3 mil 800 metros de profundidad, que llevaba a cinco turistas a ver los restos del Titanic.
La Guardia Costera de Boston, Estados Unidos, encabeza la búsqueda del sumergible.
El submarino, que viajaba a bordo del barco de Ocean Gate suele llevar turistas y expertos que, por alrededor de 125 mil dólares, al lugar donde descansa el barco tras su naufragio en 1912.
Desde hace unos años, numerosas empresas privadas se han embarcado en este negocio, con viajes que, debido a su complejidad al tiempo que requiere, pueden llegar a costar mucho dinero, hasta 200 mil euros.
La empresa Ocean Gate comenzó a llevar hace dos años, pasajeros a los que llamaba «científicos ciudadanos» en un pequeño submarino de cinco personas, aunque sus planes eran realizar una expedición de ocho días y siete noches al naufragio.
Con información de Excélsior.